De total de accidentes de tráfico que se produjeron en el año 2020, la gran mayoría (en torno a un 92%) tuvieron como resultado víctimas heridas no hospitalizados. De todas ellas, hasta el 70% según los partes de las principales aseguradoras sufrieron el llamado síndrome del latigazo cervical. Esta es la lesión leve más habitual provocada por los accidentes de tráfico.
La principal causa del latigazo cervical son los accidentes producidos por alcance entre vehículos, incidentes que suman cada año cerca de 30.000 heridas en este tipo de escenarios. Las retenciones largas, los atascos y las caravanas que, por ejemplo, se producen en las fechas señaladas como el verano o los festivos, suelen ser los momentos en los que más colisiones por alcance se producen.
El latigazo cervical, explicado según las páginas médicas o expertas en accidentes de tráfico, es una lesión de los tejidos blandos del cuello. Las causas que provocan este latigazo, que es un esguince cervical, es un movimiento brusco de la cabeza, el gesto que se produce cuando golpean de improviso el vehículo en el circulamos. El golpe produce una fuerte tensión de los músculos y los ligamentos que forman el cuello y, si esta tensión es excesiva, es cuando se provoca el esguince o latigazo cervical.
Un buen uso del reposacabezas
Para reducir el riesgo de sufrir un latigazo cervical hay que usar adecuadamente el cinturón de seguridad, los airbags y el reposacabezas. De hecho, la DGT apunta que utilizar estos tres elementos evita sufrir lesiones graves en un accidente de tráfico.
Para regular adecuadamente el reposacabezas y que sea efectivo, deberemos tener en cuenta que la parte superior del mismo tiene que estar alineada con la parte superior de la cabeza, la distancia máxima entre el reposacabezas y la cabeza debe ser de máximo 4 centímetros y la postura de conducción debe ser vertical, evitando apoyar la cabeza en el reposacabezas.
Source: NoticiasCoches