¿Qué le puede pasar a mi coche si se queda sin aceite?

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Primero comenzará a subir la temperatura del motor y, como consecuencia, algunas piezas podrían empezar a fundirse. Elementos indispensables como la junta de la culata se deteriorarían, perdiendo la estanqueidad de la culata. El motor podría llar a griparse o sufrir otra serie de graves averías sin reparación posible.

Estas son las consecuencias de llegar a circular sin aceite en el coche. El aceite o lubricante es un líquido imprescindible para el funcionamiento del vehículo en sí y del motor en concreto. Facilita que todas las piezas funcionen y rueden entre sí sin fricciones ni esfuerzos que las desgasten y además limita que las impurezas entren en el motor o en otros elementos de funcionamiento. Igualmente, contiene la temperatura de todo el sistema de propulsión para evitar desastres que acaben con la vida del coche.

Para evitar quedarnos sin vehículo, el RACE recuerda que es muy importante llevar al día el mantenimiento del coche y prestar especial atención al aceite. Hay que comprobar de vez en cuando que se encuentra entre el máximo y el mínimo estipulado por el fabricante y cambiarlo cuando corresponde.

El coche nos avisará iluminando el indicador amarillo del salpicadero de que falta aceite o el nivel está bajando y lo más correcto será parar (si se puede) para evitar que, por ejemplo, se gripe el motor. Si esta luz se enciende de color rojo, en vez de amarillo, deberemos parar el coche inmediatamente para evitar que el vehículo entre en un proceso como el anteriormente descrito. Este testigo indica que no queda aceite en el depósito.

Cuándo pierde aceite el coche y cómo darse cuenta

Cuando el coche empiece a expulsar humo de color azulado, será señal de que el motor se quema aceite porque el depósito está averiado y filtra este líquido al cilindro. También puede haber una pérdida de aceite en el propio cárter o través de las juntas, que se van estropeando con el tiempo. Una señal de que esto está pasando es que haya gotas de aceite en el suelo cuando vamos a utilizar el coche.

Además de los testigos que se enciendan, cuando el motor está falto de aceite escucharemos cómo las piezas metálicas rozan entre ellas con un ruido y una vibración que pueden llegar a ser muy molestos. El olor a quemado puede ser otro indicio que nos indica que el motor está sufriendo más de lo debido.


Source: NoticiasCoches