La edad media del parque automovilístico español empieza a ser un problema. Como ya sabemos, estamos a la cabeza de Europa en lo que se refiere a los coches más viejos (unos 14 años de media ya), mientras que la media europea está en los 11,5 años. El problema de esta cifra, más allá de la contaminación, es la seguridad, ya que muchos de estos coches presentan problemas asociados con la edad.
Según las cifras que maneja CARFAX, proveedor privado de historiales de vehículos en España y Europa, más de tres millones de vehículos esconden algún tipo de riesgo. El peligro es que muchas veces sus dueños ni siquiera lo saben, porque son coches de segunda mano sobre los que no se ha informado totalmente su estado al comprador.
Estos importantes daños que afectan a estos tres millones de usuarios deberían ser, según CARFAX, revelados por el vendedor. Entre estos datos se encuentra la información sobre importación, sobre accidentes o daños, inconsistencias de kilometraje, usos alternativos…
Según CARFAX, prácticamente uno de cada dos coches (un 48 %) con algún factor de riesgo, como accidentes o daños previos o inconsistencias en el kilometraje, tiene 15 años o más. En concreto, cuatro de cada cinco (un 80 %) de los vehículos que presentan inconsistencias de kilometraje pertenecen a este segmento de 15 años o más de antigüedad, de igual forma que dos de cada cinco turismos (un 41 %) con accidentes previos o daños datan de 2008 o incluso de antes.
Una de las comunidades autónomas más afectadas es Andalucía, donde hay más de medio millón de vehículos con más de 15 años. De estos, uno de cada seis presenta, al menos, alguno de estos vicios ocultos. Estas son las cifras de las que tiene constancia CARFAX, aunque avisan de que el total de vehículos podrían ser más.
Cómo saber si mi coche ha tenido accidentes previos
A la hora de comprar un coche de segunda mano, es importante revisar su vida anterior para asegurarnos de que no nos llevamos a casa un vehículo que pueda ponernos en peligro a nosotros o al resto de usuarios. Así, el mejor método, además de probar el coche y revisarlo de arriba abajo, es importante consultar su pasado.
El informe CARFAX, que se adquiere bajo pago en su web, se puede obtener solo con el número de matrícula o bastidor y en un momento la compañía comparte todos los datos que tiene disponibles sobre ese vehículo, incluso si ha sido importado.
También están disponibles los informes de la DGT, uno de ellos gratuito y otro más completo, con la información sobre las revisiones en la ITV incluida, bajo previo pago de una tasa administrativa.
Problemas con la etiqueta medioambiental de la DGT
La edad del coche también es importante y el riesgo de comprar un modelo que haya sufrido daños crece un 50 % en turismos de entre 9 y 11 años de antigüedad, con respecto a los que tienen entre 6 y 8 años.
Un problema añadido de comprar coches antiguos es que un 29,5 % de todo el parque español tendría serios problemas para acceder a las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE). Según ANFAC, casi dos de cada tres coches (un 64,7 %) circulan sin etiqueta medioambiental o lo hacen con la B (la menos eficiente de todas).
Source: NoticiasCoches