El SUV compacto de Kia, cuya quinta generación se empezó a comercializar en España hace apenas año y medio, es un modelo muy equilibrado y versátil. Tiene, además, una oferta mecánica bastante extensa, de modo que es complicado no encontrar la opción ideal para cada necesidad.
En este sentido, aunque estamos en una época de transición tecnológica hacia la electrificación, nosotros hemos optado por probar la versión diésel tradicional. Aunque está impulsada por una tecnología ahora “impopular”, cumple perfectamente con las actuales exigencias sobre emisiones y además permite una gran autonomía, por lo que es ideal para quienes tienen necesidad de hacer muchos kilómetros con frecuencia.
El diseño de este SUV podrá gustar más o menos, pero ese frontal tan poderoso, con las originales luces diurnas de estilo boomerang, el perfil afilado o la estilizada trasera con las ópticas unidas entre sí aportan una imagen muy sólida. También destacan y son útiles las protecciones en todo el perímetro inferior, sobre todo si toca hacer algún que otro recorrido fuera del asfalto.
La cabina de este Sportage también está perfectamente puesta al día, con acabados razonables en cuanto a calidad sin ser un tope de gama y con los recursos digitales habituales hoy en día, caso del cuadro de instrumentos (opcional) y la pantalla multimedia (ambas de 12,3 pulgadas), que permiten un control total de todas las funciones del coche mediante numerosos y bien estructurados menús.
Con un conjunto de 4,5 metros de longitud, el espacio en todas las plazas es generoso y proporcionado, perfecto para una familia, y a ello se une un muy interesante maletero de 571 litros que no está limitado por la presencia de baterías al ser esta una versión de tracción delantera sin ningún tipo de electrificación.
Un motor de los de siempre
Efectivamente, estamos ante un propulsor CRDi diésel convencional, con 1,6 litros de cubicaje y 115 caballos de potencia. Es un motor probado y fiable, bastante elástico para ser diésel, con un margen de funcionamiento ideal entre 2.000 y 4.500 rpm. El cambio es manual de seis marchas, única opción disponible, tiene cortos recorridos y el tacto es muy bueno.
La mecánica no es muy prestacional y es algo rumorosa, pero recupera bien y permite ritmos constantes de crucero para recorrer muchos kilómetros con un gasto de combustible reducido. El consumo medio homologado es de 5,2 litros a los 100 km, una cifra a la que nos hemos acercado mucho durante nuestra prueba, tras la que hemos obtenido 5,4 litros de media en un recorrido variado de más de 300 kilómetros.
Para la conducción, esta variante tiene tres perfiles de funcionamiento a elegir, Eco, Normal y Sport, pero no hemos apreciado diferencias significativas entre uno y otro. Eso sí, es un coche que ofrece un gran confort al volante, con un comportamiento muy neutro en todo tipo de carreteras.
El Kia Sportage 1.6 CRDi tiene a su favor el hecho de ser una de las versiones más asequibles de la gama, pues está disponible desde los 30.812 euros que cuesta el acabado básico Concept. En el siguiente escalón, por 33.212 euros, está la variante Drive que hemos conducido, con mejor calidad general y un equipamiento más completo.
Los acabados Concept y Drive comparten elementos como las llantas de 17 pulgadas, el climatizador bizona, detector de fatiga, control de crucero, asistente de carril, freno de estacionamiento eléctrico o los sensores de lluvia y luces, pero el segundo de ellos añade faros antiniebla por LED, sistema multimedia de 12,3 pulgadas con cámara de asistencia para el aparcamiento, ajuste lumbar en el asiento del conductor o cargadores USB para la fila trasera. Si se quiere disponer de las llantas de 18 pulgadas y el cuadro digital de la unidad de pruebas hay que recurrir al paquete Design disponible para el acabado Drive y que cuesta 950 euros adicionales.
Aunque como hemos dicho esta es una opción formidable para quien viaje mucho, pues permite acercarse a los 1.000 km de autonomía con un solo depósito de combustible, si se vive en una gran ciudad o cerca de ella es recomendable optar por la variante diésel microhíbrida con sistema eléctrico de 48 voltios, ya que por solo 1.600 euros más ofrece 136 CV, consume algo menos y está catalogada con la etiqueta Eco de la DGT, lo cual le da ventajas fiscales y de movilidad en dicho entorno.
FICHA TÉCNICA
Motor: diésel.
Potencia (kW/CV): 85/115.
Cambio: manual, 6 velocidades.
Largo (mm): 4.515.
Ancho (mm): 1.865.
Alto (mm): 1.645.
Maletero (litros): 571.
Velocidad máxima (km/h): 175.
De 0 a 100 km/h (seg.): 12,1.
Consumo medio (l/100 km): 5,2.
Emisiones CO2 (gr/km): 137.
Precio (euros): desde 30.812.
Source: NoticiasCoches