Inglaterra, con unos 1.300 despidos, y Alemania, con 2.300, son los enclaves que más van a sufrir la decisión de Ford de reducir sus plantillas en el Viejo Continente.
Su objetivo de centrar la actividad en el coche eléctrico, también en los industriales ligeros, le ha venido como anillo al dedo a la fábrica española de Almussafes, que ha sido una de las elegidas para este tipo de modelos “cero emisiones”. La valenciana será una de las tres plantas de Ford que van a quedar plenamente activas en Europa.
Buenas noticias, sin duda, para un colectivo muy importante y de mucho peso en la región levantina, que ya se preparara para la reorganización.
Respaldo de Ford
Los dos nuevos modelos eléctricos adjudicados el pasado verano, desarrollados a partir de la nueva plataforma GE2, van a ser la salvación, aunque otros departamentos, como los de Marketing y Ventas, no escaparán a estos recortes en proporción al “tamaño de cada mercado”, según han anunciado los dirigentes de la marca.
Igualmente, la planta valenciana verá reducida su mano de obra para adecuarse a la nueva realidad, que exige menos efectivos humanos, pero aún así podrá mantener su actividad y el respaldo de la marca del óvalo.
Source: NoticiasCoches