Ya se ha dictado la primera sentencia estimatoria en respuesta a la demanda de uno de los afectados por el cártel de los coches, reclamando el pago de la indemnización correspondiente tras haber pagado de más por la compra de su vehículo. ¿Qué quiere decir que sea estimatoria? Pues que, efectivamente, el juez ha aceptado la petición del reclamante y el fabricante de automóviles deberá pagar la indemnización aprobada, que en este caso de es de algo más de 1.100 euros.
Para entender qué significa realmente esta sentencia y cuál es el panorama que espera, a partir de ahora, a los afectados por el cártel de coches, hablamos con Albert Poch, abogado especialista en temas de competencia en Redi Abogados. «La sentencia es una buena noticia, nos dice que las reclamaciones son posibles», explica. Esta primera sentencia estimatoria es importante por tres motivos, apunta Poch.
El primero es que, en efecto, un juez ha reconocido el daño provocado a los compradores de coches entre 2006 y 2013. Esto quiere decir que, efectivamente, el cártel y los acuerdos anticompetencia de los fabricantes de automóviles tuvieron un impacto negativo en el precio de los coches y todo aquel que compró un coche en esos años pagó de más. Así lo dice el juez tras dictar sentencia.
«La sentencia es una buena noticia, nos dice que las reclamaciones son posibles»
El segundo motivo para celebrar la sentencia es que, aunque no se haya cuantificado exactamente el daño causado y la indemnización se haya fijado en el 5% del precio de venta del vehículo, esta decisión judicial abre la puerta a que, a partir de ahora, las reclamaciones sean más cuantiosas. En tanto que se mejoren los informes periciales y se afine la aportación de pruebas del daño causado al comprador, se podría llegar a reclamar indemnizaciones de hasta el 13% del precio de compra, apunta Poch.
Aquí influye un aspecto que debe quedar claro. Es una sentencia de primera instancia, no es jurisprudencia, lo que quiere decir que sí es importante tomarla como una posibilidad de lo que podría pasar, pero no dictamina exactamente el procedimiento a seguir a partir de ahora. «El hecho de que salga de un juzgado de Madrid mercantil es importante», afirma Poch. «Es una sentencia clara a nivel procesal, elimina muchas barreras y debería animar a los afectados a reclamar más que otra cosa».
«Solo reclamará el 10% de los afectados»
Y, por último, la sentencia reconoce que el nuevo plazo para presentar las reclamaciones es de 5 años desde que se dictó la sentencia del Tribunal Supremo reconociendo la existencia del cártel de coches. Así, los afectados disponen de más tiempo para preparar el proceso judicial y enfrentarse a los fabricantes.
En este sentido, Poch señala que hay unos 8 millones de afectados pero que, al final de todo el proceso, ni siquiera un 10% de todos ellos acabarán reclamando. Y es que la posibilidad de iniciar un procedimiento judicial que puede alargarse en el tiempo y que, además, nos puede costar dinero no es muy atractiva.
«Los fabricantes reconocen que ha habido una sentencia de la CNMC, pero no el daño causado», desarrolla este abogado. Por esta razón, de momento no ha habido ni tan siquiera opción a reuniones para encontrar un acuerdo. La posibilidad de presentar una demanda a través de alguna de estas asociaciones es la más extendida, aunque lo ideal sería presentar una acción colectiva, como se hace en Portugal. Poch apostilla que, además, demandar de manera individual es un proceso que desgasta y satura los juzgados y que, por lo tanto, puede acabar disuadiendo a los afectados.
«La sentencia aporta optimismo y da claridad al asunto»
La importancia del informe pericial
La redacción de un informe pericial que muestre el daño causado es la piedra angular del procedimiento y muchos afectados dudan si pueden enfrentarse a ello, ya que implica rebuscar la factura de compra, hablar con el concesionario… «Aunque la sentencia no lo dice, lo que se necesita es presentar un escenario contrafactual en el que se den variables creíbles que justifiquen que el precio de compra fue superior a lo que debería haber sido».
«La sentencia aporta optimismo y da claridad al asunto», señala Poch. Pero, aun así, la gente teme a este tipo de procesos judiciales, lo que puede frenar a muchos a la hora de reclamar. El proceso depende mucho del juzgado y de la potencial avalancha de pleitos individuales, aunque es verdad que esta sentencia ha sido muy rápida ya que empezó en abril y ha acabado ahora. «Es un plazo muy bueno porque se ha hecho por verbal y no por ordinario», explica Poch, quien espera que esta primera sentencia estimatoria anime a la gente a reclamar.
Source: NoticiasCoches