Los radares en zonas escolares ponen casi 700 multas al día por exceso de velocidad

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Cada día, los 17 radares instalados en las proximidades de zonas escolares ponen 686 multas de media, alrededor de 40 sanciones diarias cada dispositivo. Sin embargo, comparando los datos de cuando se instalaron los radares, el pasado 16 de enero, con los datos de estos últimos días, hasta el 6 de febrero, las infracciones se han reducido un 40%. Son datos recogidos en el Informe de Siniestralidad de la ciudad de Barcelona, presentado esta mañana por la teniente de alcalde de Movilidad, Laia Bonet.

El exceso de velocidad es uno de los aspectos que más preocupan a las autoridades de tráfico de la ciudad de Barcelona. Laia Bonet ha recordado que “la velocidad es una de las primeras causas indirectas de los siniestros”, y ha puesto énfasis en que “la DGT afirma que conduciendo a 30 km/h, el riesgo de muerte en caso de atropello es del 10%. Sin embargo, conduciendo a 50 km/h, esa probabilidad de muerte ya sube al 90%, y en un atropello a más de 80 km/h, es prácticamente imposible sobrevivir”.

Este agravamiento de los efectos de los siniestros por la velocidad, es lo que llevó al Ajuntament a dotarse con sistemas de control automático de los excesos de velocidad, que ya figuraban en en los objetivos del Plan de Movilidad Urbana 2024 y el Plan Local de Seguridad Vial de Barcelona 2019-22. Así, en el último año se ha desplegado un nuevo sistema de radares dentro de la ciudad que ha incorporado un total de 4 ubicaciones con radares de tramo y 17 ubicaciones con radares de punto, ubicadas principalmente en entornos escolares.

Conductores responsables

Laia Bonet ha señalado que “la velocidad reduce enormemente la capacidad de reacción”, aunque también señala que, en líneas generales, “la inmensa mayoría de la gente que conduce por Barcelona cumple con los límites de velocidad”. Bonet ha destacado que “tan solo se sancionan a 19 vehículos de cada 10.000 que pasan por los radares”.

Los cuatro radares de tramo y los 17 puntuales en zonas escolares se han sumado a los que ya existían en la Rondas. Sobre si se instalarán más, Laia Bonet ha expuesto que seguirán “observando”, pero que “deseamos no tener que instalar más”.


Source: NoticiasCoches